Página Diocesana

Homilía para el 2º domingo ordinario 2020

Ser testigos de Jesús
El texto del Evangelio de hoy comienza diciendo que Jesús iba hacia donde estaba Juan el Bautista. Así viene hoy a nuestro encuentro, primero en el Evangelio y luego en el Pan y el Vino. Al igual que Juan, a nosotros nos toca dar testimonio de Jesús, alimentados con su Cuerpo y su Sangre.

Homilía para el domingo del Bautismo del Señor 2020

Complacer a Dios haciendo el bien
Este domingo en que nos hemos reunido para la Eucaristía, celebramos la fiesta del Bautismo de Jesús. Es una oportunidad que se nos presenta para renovar nuestra condición de bautizados y asumir con mayor entusiasmo el compromiso que recibimos el día del Bautismo.

Homilía para el domingo de la Epifanía del Señor 2020

Buscar y encontrar a Jesús para ser sus testigos
Hemos venido este domingo a encontrarnos con Jesús Niño, al igual que los magos de oriente. Ellos vinieron desde sus pueblos guiados por la estrella; nosotros desde nuestras casas, barrios, pueblos, ciudades y países, guiados por esta imagen de Santo Niño Milagroso, que está siempre a la espera de los peregrinos para escucharlos, confortarlos, curarlos, reanimarlos. Este encuentro lo vivimos y agradecemos con la Eucaristía dominical, en la que lo recibiremos en la Comunión sacramental.

Homilía para el domingo de la Sagrada Familia 2019

Ser acogedores de los migrantes
Este domingo del tiempo de Navidad estamos celebrando la fiesta de la Sagrada Familia. Sus personas y su vida se nos ofrecen como modelo de vida para cada bautizado y para nuestras familias. José y María asumieron con fidelidad la misión que Dios les encomendó a través del Ángel: recibir en su vida personal y en su proyecto matrimonial al Mesías, ponerle el nombre de Jesús, criarlo y formarlo. En el texto del Evangelio nos encontramos un testimonio del cuidado que tuvieron con el Niño, para ponerlo a salvo de la crueldad insaciable de Herodes.

Homilía para la Solemnidad de la Natividad del Señor 2019

Comunicar la Vida de Dios
Después de prepararnos durante el Adviento, hoy llegamos a la gran fiesta del Nacimiento del Señor. El Hijo de Dios asumió nuestra condición humana, limitada, frágil, mortal, para darnos la vida y llevarnos a la vida en plenitud por medio de su muerte y resurrección. Con la Eucaristía de hoy damos gracias a Dios este don suyo, que nos renueva y nos impulsa a luchar a favor de la vida.

Homilía para el 4º domingo de Adviento 2019

José, el varón justo y obediente
Estamos a la víspera de la celebración de la Navidad, para la que nos hemos estado preparando durante el Adviento. En la liturgia de este domingo se resalta la figura de María, la mamá del Hijo de Dios, del Dios-con-nosotros, como lo anunció el profeta Isaías. El Hijo de Dios se encarnó en el vientre de la Virgen; allí asumió nuestra condición frágil, limitada, mortal, por la acción del Espíritu Santo, como les explicó el ángel, primero a María y después a José. Hoy viene a nuestro encuentro en un pedazo de pan y un poco de vino, ofreciéndose como alimento para el camino.