Celebración de la imposición de la ceniza
De parte del Equipo Diocesano de Ministerios Laicales, les comparto la guía para la imposición de la ceniza.
El archivo lo pueden descargar aquí → Guía para la celebración de la ceniza 2018
De parte del Equipo Diocesano de Ministerios Laicales, les comparto la guía para la imposición de la ceniza.
El archivo lo pueden descargar aquí → Guía para la celebración de la ceniza 2018
Este domingo los textos de la Palabra de Dios nos ayudan a volver sobre algo que es central en la vida de los bautizados: el servicio. La reflexión sobre esta dimensión de nuestra vida personal y de Iglesia nos preparará para recibir a Jesús en la Comunión y para regresar a nuestra vida ordinaria de la semana a vivir el servicio.
Vivimos en un ambiente en el que las instituciones y las autoridades, tanto civiles como religiosas han perdido la credibilidad. En el texto del Evangelio de este domingo, Jesús es presentado por san Marcos como alguien que tenía autoridad. En la sinagoga enseñaba como quien tiene autoridad, mandaba a los espíritus inmundos con autoridad y lo obedecían. Hoy nos encontraremos sacramentalmente con ese mismo Jesús, lo recibiremos hecho Pan y Vino, lo llevaremos con nosotros a la casa, a la comunidad, al trabajo, a la sociedad, durante toda la semana.
Semilla de la Palabra,
Para el 4° Domingo Ordinario.
Descargar archivo aquí: Semilla 854 28 -01- 18
Jesús comenzó su predicación anunciando el Reino de Dios, invitando a la conversión y llamando a sus primeros discípulos. Lo acabamos de escuchar en el texto del Evangelio. Todo su ministerio lo dedicó a anunciar y hacer presente el Reino. Esto es algo que nosotros como Iglesia hemos perdido, pues la Iglesia está al servicio del Reino, al igual que Jesús. Al celebrar la Eucaristía de este domingo, tenemos la oportunidad de renovar personalmente y como comunidad parroquial nuestro compromiso de trabajar por el Reino de Dios.
Semilla de la Palabra,
Para el 3er. Domingo Ordinario.
Descargar archivo aqui: Semilla 853 21- 01-18
Después de la Navidad volvemos al tiempo ordinario. A partir de hoy y a lo largo de todo el año, el Evangelio nos ayudará a vivir el encuentro con Jesús, encuentro que nos llevará a conocerlo, escucharlo, aceptarlo, creer en Él y seguirlo hasta la cruz. Para ello tenemos que estar interesados, abiertos, dispuestos a lo que Jesús nos ofrezca, tal como sucedió con sus primeros discípulos.
Este domingo estamos celebrando la Epifanía del Señor, es decir, la manifestación de Dios a todos los pueblos de la tierra, porque a todos los quiere salvar. Epifanía significa manifestación. Dios se dio a conocer en la persona de su Hijo, nacido en Belén de la Virgen María. Los pueblos de la tierra están representados en los magos de Oriente, a quienes llamamos los Reyes Magos. Con esta Eucaristía agradecemos a Dios que nos dio a su Hijo, que vino al mundo para hacer que todos los pueblos fueran uno solo, y que se dio a conocer en la pequeñez del recién nacido y desde Belén, periferia de Jerusalén.