Homilía para el 20º domingo ordinario 2018

Comer la Carne que da vida

Ordinario20 B 18

Jesús no se cansaba de ofrecerse como el Pan vivo bajado del cielo, el Pan que da la vida al mundo, el Pan que da la vida para siempre. Esto provocó discusiones en la sinagoga de Cafarnaúm sobre cómo era posible que Jesús diera a comer su Carne. El Pan que ofrecía era su Carne, es decir, su persona, su mensaje, su proyecto, su estilo de vida. Y también dijo que quien se lo comiera y se lo bebiera, tendría vida. Hoy, en la Comunión, nos da su Cuerpo y su Sangre, para que tengamos vida.

Homilía para el 19º domingo ordinario

Comer el Pan vivo bajado del cielo

Ordinario19 B 18

La revelación de Jesús como el Pan vivo bajado del cielo causó conflictos y desconcierto, como acabamos de escuchar en el texto del evangelio. Cuando a alguien no le interesa ni Jesús ni las cosas de la comunidad o de la sociedad, siempre les va a poner peros o va a hablar mal de ellos. Así le sucedió a Jesús en la sinagoga de Cafarnaúm. Esto nos puede ayudar para prepararnos a recibir de manera sacramental a Jesús, el Pan vivo bajado del cielo, en la Comunión.

Homilía para el 18º domingo ordinario 2018

Creer en Jesús, el Pan de vida

Ordinario18 B 18

En este texto que acabamos de escuchar, san Juan nos narra lo que sucedió al día siguiente de la multiplicación de los panes. La gente volvió a buscar a Jesús para comer nuevamente. Jesús se lo echó en cara al decirles que no lo andaban buscando por los signos del Reino que realizaba sino por haber comido hasta llenarse y los invitó a trabajar por el alimento que dura para la vida eterna. Esa invitación es para nosotros hoy, que nos reunimos para la Eucaristía dominical.

Homilía para el 17º domingo ordinario 2018

El compartir hecho Eucaristía

Ordinario17 B 18

El domingo pasado escuchamos cómo a Jesús se le removieron las entrañas al ver a la multitud que andaba como ovejas sin pastor y cómo comenzó a atenderla enseñándoles muchas cosas. Hoy, en el texto del evangelio, nos encontramos con la segunda parte de ese encuentro. La preocupación de Jesús no fue sólo por la enseñanza sino también por el hambre que estaba sintiendo la gente. Él fue el primero en reaccionar ante esta situación y la planteó a sus discípulos. Hoy lo hace para nosotros, que nos hemos reunido para celebrar la Eucaristía dominical.

Homilía para el 16º domingo ordinario 2018

Pastores misericordiosos

Ordinario16 B 18

El proyecto de Dios es que su pueblo no ande como rebaño sin pastor, es decir, a la deriva, sin rumbo, abandonado, a merced de las fieras. Y no sólo quiere que tenga pastores, sino que estos sean buenos. Jesús realizó a plenitud este proyecto, como aparece en el texto del Evangelio que acabamos de escuchar. A Él se le removieron las entrañas porque las gentes que lo esperaban a la orilla del lago andaban como ovejas sin pastor, por lo que se puso a responder a sus necesidades.

Homilía para el 15º domingo ordinario 2018

Conciencia de ser enviados

Ordinario15 B 18

Jesús llamó a los Doce para enviarlos a la misión. Es lo que nos ofrece hoy el texto del evangelio. Con la Eucaristía de este domingo agradecemos a Dios el llamado que nos hizo en el Bautismo a ser sus hijos, a ser discípulos de Jesús, a ser templos de su Espíritu. Y no solamente agradecemos, sino que renovamos nuestro compromiso de vivir como misioneros, porque además de ser llamados también fuimos enviados a la misión como los Doce. Es importante que no perdamos la conciencia de haber sido enviados a la misión para que la vivamos a plenitud y la realicemos con fidelidad.