Homilía del 5º domingo de Cuaresma 2011

“Señor, ya huele mal” (Jn 11, 39). Estas palabras que le dijo Marta a Jesús cuando Él pidió que quitaran la losa que cerraba el sepulcro de Lázaro, las podemos aplicar, sin temor a equivocarnos, a la situación que se está viviendo en nuestro país. Un diario de la semana pasada decía en uno de sus titulares de la primera plana: “Casi se triplican ejecuciones en primer trimestre”. Esto es en el Estado de Jalisco. En los primeros tres meses de 2010 hubo 67; en 2011 ya van 181.

Homilía del 4º domingo de Cuaresma 2011

“Yo era ciego y ahora veo” (Jn 9, 25). Esta expresión del que nació ciego manifiesta que había cambiado su situación. Y no tanto porque ya podía ver, sino porque en el encuentro con Jesús había descubierto que Él lo iluminaba en su vida. Estaba dando testimonio del Señor, se había convertido en misionero. Esto nos dice lo que tiene que ser nuestra vida ordinaria: encontrarnos con Jesús, dejar que nos ilumine, creer en Él, convertirnos en discípulos suyos y dar testimonio.

Homilía del 3er domingo de Cuaresma 2011

“Señor, dame de esa agua para que no vuelva a tener sed” (Jn 4, 15). Estas palabras que salen del fondo del corazón de la samaritana, expresan lo que tendría que ser nuestra actitud ante Jesús. Como humanos tenemos sed de Dios y como bautizados tenemos la manera de calmarla: con Jesús. Pero, en la práctica, la gran mayoría de los cristianos busca saciar su sed en aguas que ofrecen el mercado y la sociedad de consumo. Hoy domingo se nos invita a recurrir a Jesús.

Homilía del 2º domingo de Cuaresma 2011

“¡Qué bueno sería quedarnos aquí!” (Mt 17, 4). Estas palabras dichas por Pedro al ver a Jesús transfigurado, reflejan la actitud de la mayoría de los bautizados. Pocos son los que quieren una vida cristiana comprometida; casi todo el mundo diseña su propia manera de ser cristiano: sin compromisos, lo más fácil, lo más cómodo, a la medida de los propios intereses. Y no es así. Dios nos pide escuchar a su Hijo; y Jesús nos habla de seguirlo por el camino de la cruz.