Bodas de oro sacerdotales del P. Manuel Cárdenas Contreras

Agradecido por el don de la vida y el regalo del sacerdocio, el P. Manuel Cárdenas Contreras con una concelebración eucarística y con una comida en el jardín de Concepción de Buenos Aires, el martes 12 de julio, celebró estos acontecimientos en un ambiente festivo popular.

Desde muy temprano, el repique de las campanas y las notas del mariachi anunciaron la fiesta del pueblo a su paisano y actual párroco desde hace diecisiete años de esta comunidad encomendada al patrocinio de la Inmaculada Concepción y perteneciente a la cuarta vicaría. Alrededor de las 10:00 de la mañana comenzaron a llegar los invitados.

La casa del Padre Manuel, llena de artesanías y recién pintada, fue el lugar de concentración. La amenaza de lluvia obligó a cambiar el lugar de la concelebración; no fue en la plaza de toros, como se tenía programado, sino en el templo parroquial. Antes de las 12:00 horas todas las bancas del templo estaban ocupadas. Veinte minutos más tarde inició la concelebración que fue presidida por nuestro señor obispo don Rafael León y concelebrada por los obispos fray José de Jesús González, obispo de la Prelatura de El Nayar, José Refugio Mercado, obispo emérito de la diócesis de Tehuantepec, 20 sacerdotes de nuestra diócesis y 48 venidos de Tabasco, Mérida, Zamora, Guadalajara y otras diócesis.

En la predicación, don Rafael, primero felicitó al P. Cárdenas por su fidelidad a su vocación sacerdotal. “Su fidelidad suscita nuestra admiración. Ha sorteado con valentía, serenidad y paz una época de grandes cambios y numerosas turbulencias. Usted ha fincado su vida en la inalterable firmeza de lo eterno y ha encaminado su sacerdocio por las sendas de las alturas que conducen a Dios”, afirmó don Rafael. Luego alabó sus esfuerzos por vivir su identidad sacerdotal en medio de las realidades y desafíos propios de estos nuevos tiempos. Al final, le prometió orar al Señor, para que unido a Jesucristo como amigo continuara desgastando su vida en el anuncio del Evangelio, en la edificación de la comunidad cristiana y en la siembra del reinado de Dios.

Al final de la eucaristía, el P. Manuel, con su corazón lleno de alegría, agradeció la presencia y muestras de cariño de los participantes. Sin duda que ha sido un día de los más significativos en sus 80 años de vida. La celebración de sus bodas de oro sacerdotales lo llevó a ser memoria de su pasado; de sus alegrías y tristezas. Recordó a su padre a quien no conoció porque fue asesinado cuando él tenía apenas ocho meses de vida. A su madre Petra quien lo engendró, guió y acompañó en momentos decisivos de su vida. Nos confesó que la pérdida de su madre ha sido uno de los momentos más tristes de su vida. Al P. Ignacio Urzúa quien despertó su vocación al sacerdocio. A su entrañable amigo el señor obispo don José del Valle Navarro. A los superiores y maestros del Seminario y obispos; a sus hermanos sacerdotes y a sus íntimos amigos. Pero también, es justo agradecer el cariño de la gente sencilla de nuestras comunidades, que a pesar de nuestros errores y pecados, siguen teniendo un gran respeto y aprecio por nosotros.

Felicidades P. Manuel que Dios lo siga conservando fiel a su vocación y misión.

El P. Manuel Cárdenas Contreras nació el 3 de enero de 1931, en el rancho “Valle Florido”, del municipio de Concepción de Buenos Aires, Jalisco. A los dieciséis años de edad ingresó al Seminario de Guadalajara donde estudió hasta 2o. de teología. Luego, incardinado a la diócesis de Tabasco, terminó sus estudios en el Seminario de Mérida. El 9 de julio de 1961, fue ordenado sacerdote por el señor Arzobispo don Fernando Ruíz Solórzano, en la catedral de Mérida. El 30 de diciembre de este mismo año, cantó su primera misa en su pueblo natal. En 1973 se incardina a nuestra diócesis donde ha sido párroco de las comunidades de Teocuitatlán, Atoyac y, actualmente desde 1994, párroco de su pueblo natal Concepción de Buenos Aires.