Semilla de la palabra domingo 1 de Diciembre
Hoja Dominical La Semilla de la Palabra. Para el domingo 01 Diciembre de 2013 Primer...
Información acerca de la Diócesis de Ciudad Guzmán.
Hoja Dominical La Semilla de la Palabra. Para el domingo 01 Diciembre de 2013 Primer...
Este año en las celebraciones dominicales viviremos el ciclo litúrgico A. Durante este ciclo nos acercamos al testimonio y a las enseñanzas de Jesús que nos trasmite el Evangelio según San Mateo.
Estamos a finales del siglo I: hacia el año 70 acontece la catástrofe sobre Judea, pues Jerusalén y su templo son destruidos por los romanos. Posteriormente, los judíos cristianos son excluidos formalmente de la sinagoga y deben comenzar un caminar solos. Mateo parece escribir principalmente para estas comunidades, conscientes ya de su propia identidad.
Textos: 2 Sam 5, 1-3; Col 1, 12-20; Lc 23, 35-43.
Hoy que se clausura la celebración del Año de la Fe, en la solemnidad de Cristo, Rey del Universo, se nos ofrece la imagen del Buen Pastor para que la contemplemos y nos veamos reflejados en ella. Jesús estaba en la cruz, clavado como rey de los judíos, ejerciendo su ser Pastor. Jesús fue un Rey Pastor, no un rey dominante, aplastador, poderoso; estaba en la peor condición en que se podía encontrar un judío: coronado de espinas, colgado en la cruz, insultado por todos.
Hoja Dominical La Semilla de la Palabra. Para el domingo 24 de Noviembre de 2013...
Textos: Mal 3, 19-20; 2 Tes 3, 7-12; Lc 21, 5-19.
Jesús aprovechó que algunas personas estaban alabando la belleza del templo de Jerusalén, para aclarar cuál debe ser la preocupación de sus discípulos. En este domingo podemos aprovechar la enseñanza de Jesús para revisar nuestra vida y prepararnos a la Comunión sacramental. La preocupación de los discípulos de Jesús debe ser la de ser sus testigos. Los templos materiales se construyen y se destruyen y, al final de cuentas, para Jesús no son lo más importante.
Textos: 2 Mac 7, 1-2. 9-14; 2 Tes 2, 16-3, 5; Lc 20, 20-38.
El texto del Evangelio nos ofrece un punto que ha sido y seguirá siendo un problema de la humanidad. Se trata de lo que sucede después de la muerte. Esto aparece en la polémica que vivían los saduceos respecto a la resurrección de los muertos. Ellos no la aceptaban y, además, se esforzaban porque se negara. La expresión final de Jesús nos ayuda a descubrir en dónde nos debemos ubicar sus discípulos, cuando presenta a Dios como Dios de vivos y no de muertos.
Textos: Sab 11, 22-12, 2; 2 Tes 1, 11-2, 2; Lc 19, 1-10.
Lo que escuchamos en el texto del Evangelio es lo que pasa, o debería pasar, en la celebración de la Eucaristía. Generalmente desligamos la Misa de nuestra vida diaria, poco tenemos conciencia de que la Eucaristía, de manera especial la de los domingos, es una oportunidad para vivir la conversión. Jesús viene a encontrarnos, nos llama por nuestro nombre, se hospeda en nuestra casa, comparte el alimento y nos transforma. Zaqueo tomó una decisión ante Jesús.
En el marco del 50 aniversario de la apertura del Concilio Ecuménico Vaticano II, celebramos el Año de la Fe como una oportunidad de profundizar nuestra experiencia de encuentro con Jesucristo.
Textos: Eclo 35, 15-17. 20-22; 2 Tim 4, 6-8. 16-18; Lc 18, 9-14.
Nos hemos reunido para celebrar la Eucaristía dominical. Hemos venido en nuestra condición de pecadores, la cual reconocimos al comienzo de la Misa para disponernos a escuchar la Palabra de Dios y a saborear luego el Cuerpo y la Sangre de Jesús. Esto que hemos realizado, lo debemos vivir y fortalecer a lo largo de nuestra vida, como nos ayuda Jesús con la parábola que acabamos de escuchar. No debemos ser soberbios sino sencillos ante Dios y los demás
Textos: Zac 8, 20-23; Rm 10, 9-18; Mc 16, 15-20.
Hoy que celebramos el Domingo Mundial de las Misiones, la Palabra de Dios nos recuerda la misión que tenemos como Iglesia. Este es un buen día para revisar y fortalecer nuestra práctica misionera. La misión de la Iglesia consiste en predicar el Evangelio por todo el mundo, como escuchamos en el texto del Evangelio. Esa misión que Jesús dejó a la Iglesia, personalmente la recibimos en el Bautismo y ahí mismo fuimos consagrados para realizarla.
Textos: 2 Re 5, 14-17; 2 Tim 2, 8-13; Lc 17, 11-19.
Para prepararnos a la Comunión sacramental, este domingo la Palabra de Dios nos ofrece para la reflexión testimonios de servicio y de agradecimiento a Dios. Por una parte Naamán, un general sirio, curado por Eliseo; por otra parte, diez leprosos curados por Jesús. Estos pasajes bíblicos nos ayudan a revisar y valorar nuestra ubicación de frente a los desechados de la sociedad, si nos compadecemos de ellos y les tendemos la mano o, por el contrario, los ignoramos.
Textos: Hab 1, 2-3; 2, 2-4; 2 Tim 1, 6-8. 13-14; Lc 17, 5-10.
La Palabra de Dios que se nos ofrece para reflexionar este domingo nos habla de la fe y del servicio. Nosotros recibimos la fe en el Bautismo; en la Eucaristía la alimentamos. Es una fe que tiene como centro la muerte y resurrección de Jesús, acontecimiento que celebramos de manera especial los domingos. Esta fe, para que aparezca que realmente lo es, necesita de signos. No es para hacer milagros ni para recibirlos, sino para vivir el servicio, tal como Jesús nos enseña.