Homilía para el 24º domingo ordinario 2014
Perdonar siempre, como Dios
El texto del Evangelio que acabamos de escuchar es continuación y complementación del que reflexionamos el domingo pasado. Tanto la corrección fraterna como el perdón son fundamentales en la vida de los discípulos y discípulas de Jesús para construir la comunidad. Hoy, que nos reunimos para la celebración dominical de la Eucaristía, la reflexión sobre el perdón nos prepara para acercarnos a comulgar, pues no podemos vivir la comunión sin la experiencia del perdón.