Homilía del 22° domingo ordinario 2011
“¡Apártate de mí, Satanás!”
Textos: Jer 20, 7-9; Rm 12, 1-2; Mt 16, 21-27.
“¡Apártate de mí, Satanás!” (Mt 16, 23). Con estas palabras, le pidió Jesús a Pedro que se pusiera a seguirlo en su camino. ¡Llamó Satanás al que poco antes lo había reconocido como el Mesías, el Hijo de Dios vivo, como reflexionamos el domingo pasado! ¡Le dijo piedra de tropiezo al que había elegido como piedra sobre la que se construiría la comunidad! Y es que Pedro, al reconocerlo como Mesías, se imaginó a Jesús triunfante, poderoso. Y no era así la cosa.